Recuerdo de una noche en Sevilla
Cantando por lo bajini, sin muchos aspavientos, tal como le gustaba hacerlo con los amigos; «Volver», «las mañanitas», etc., junto a su siempre amada Mercedes, de este modo don Gabriel García Márquez le despedimos, hoy cuando desde Mexico nos llegan noticias de su funeral.
Fue un honor conocerle a usted y a Mercedes, su bellísima esposa, aquella abrileña noche de la preferia sevillana de 1994 con Charo, nuestra anfitriona, tras la corrida en la Maestranza del torero Rincón quien con sus íntimos amigos colombianos, su apoderado y un reducido grupo de amigos españoles pasamos una inolvidable velada.
Desde Sevilla, en abril, hoy día de San Jorge con un sol radiante, a las puertas ya de la Feria, le dedico este emocionado … Adiós.